En el primer episodio ya sabemos que se muere alguien. Ahora nos toca jugar a adivinar. A diferencia de la temporada anterior, en esta el misterio pasa a segundo plano, casi que te olvidas de que se muere alguien. Te acordás en el último capítulo cuando ya te das cuenta quien va a partir de este mundo.
Las relaciones entre los personajes siguen siendo parte vital de la historia. Son muy interesantes los desarrollos. Nos presentan a dos parejas jóvenes dónde los varones fueron juntos a la universidad y uno de ellos invitó a la otra pareja a viajar a Sicilia. Por supuesto los ricos siguen siendo los protagonistas de esta serie.
Después tenemos a tres generaciones de varones de una misma familia, que viajan a buscar a sus posibles familiares en Italia, y conocemos las internas entre ellos y salen a florecer culpas entre abuelo, padre e hijo. Muy interesante elección que sean los tres varones.
Y la que vuelve a esta temporada, esta vez no tan borracha y casada, pero con los mismos traumas de siempre es Tanya, nuevamente Jennifer Coolidge haciendo un gran papel, esta vez también acompañada de una asistente, pues mucha plata tiene.
No debo olvidarme de las protagonistas italianas. Dos chicas que son trabajadoras sexuales para explotar y sacarles el máximo dinero posible a estos yankees con plata. Una tiene el sueño de tener su tienda de ropa, la otra quiere ser cantante.
El drama se apodera más de esta temporada. Los vínculos entre los personajes están muy bien desarrollados, casi todos se cruzan e interactúan con todos, el director y guionista logra cautivarnos una vez más con las historias, atraparnos y querer saber más de estos personajes, de lo que va a pasar, que no va a pasar.
Logra que uno se interese por estos personajes, que te den ganas de saber más. Creo que la segunda temporada me la vi en 3 días. Si bien son sólo siete capítulos, tiene una duración de casi una hora, y aun así se hacen muy llevaderos.
Ayuda mucho que la fotografía sea hermosa. Los paisajes de Italia con sus playas y sus montañas son tan bellos que si sólo queres cautivarte por estos, está muy bien. Una vez más la banda sonora está excelentemente elegida y no sobra en ningún momento.
Las actuaciones están muy bien todas. Pero yo quiero destacar a Aubrey Plaza. No recuerdo haberla visto en otro papel que no sea la queridísima April Ludgate, y en esta serie me sorprendió muchísimo su actuación, capturando lo que siente Harper en todo momento. Will Sharpe, quién hace de su pareja, logra a estar a la altura de Plaza, lo hace muy bien. El resto del elenco están al nivel de la serie.
El misterio de quién muere comienza a develarse en el sexto capítulo, pero no del todo. En el último ya es clarísimo y es un gran capítulo final para esa temporada.
Deja muchos mensajes de la familia, el amor, la amistad, la traición, la confianza, la muerte y…la plata. Cómo el vil metal hace que mucha gente llegue a extremos ridículos para obtener eso, porque una vez que obtuviste ese “status” no queres volver a bajar o cómo algunas personas anhelan ese status porque creen que trae la felicidad, y curiosamente, uno de los pensamientos que más se me cruzó en esta segunda temporada fue cómo el tener mucha plata, no te hace para nada feliz. La felicidad va más allá de la economía, y algunas personas dirán que mi visión está un tanto romantizada…no creo que sea así. Nunca fui una persona con mucha plata, si fui una persona con poca.
Mi recomendación: Gran segunda temporada, de una gran serie. Vale la pena ver.
Mi puntuación: 8/10
Donde Verla: HBO Max
Tiempo invertido: 1 temporada, 7 episodios. 55-60 minutos
Zona de spoiler:
Se repite una historia. El amigo que le quita las mujeres al otro porque puede y porque quiere. No es tan grave, además es del lado masculino esta vez.
No hubiese podido adivinar el giro del capítulo final, jamás imagine que el marido de Tanya era quién estaba detrás de todo eso. Si parecía haber algo extraño en estos “amigos gais” como le dice ella. Nunca lo terminan de confirmar si fue Greg quién pensó todo, pero queda clarito. Al menos para mí.
Tenía la esperanza de que Lucia no lo estaba cagando a Albie. Tenía la esperanza de que de verdad ella gustara de él. Será que soy tan inocente como él, pero me hubiese gustado que él tenga ese final feliz. Quizás lo tenga con Portia.
Hablando de Portia, que interesante es ver cómo algunas pequeñas elecciones pueden cambiarte tanto la vida. Es claro que ella decide quedarse con Jack porque es más carismático y más fachero que Albie. Básicamente si ella hubiese decidido ir a sentarse con Albie a la playa, ella hubiera zafado de casi ser secuestrada y él se hubiese ahorrado 50.000 euros. Pero claramente la historia hubiese sido más aburrida.
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