De lo que he visto hasta ahora de Ariel Winograd este film es el peorcito, un film que empieza potente con esa primera escena de Peretti hablándole a la pantalla, tratando de explicarnos o de excusarse, pero luego cae en una meseta de la cual sale por momentos y vuelve a caer. Tiene buenos momentos cómicos, está repleta de clichés y algunas situaciones que parecen poco reales.
Ya sé que siempre digo que hay que entender que es película, que es una ficción, pero cuando te intentan contar una historia como si fuese algo posible, algo que realmente puede suceder no te queda otra que desconfiar de algunas situaciones extrañas. El film lo vi con mi amiga que es mamá, y mucho de lo que sucede cuando la madre está en la casa, si es real. En varias familias suceden estas situaciones donde si la madre no está los hijos o el padre no saben qué hacer, el “famoso” trabajo silencioso de las madres, se hacen cargo de un millón de cosas sin decir nada, y hasta que no se va, no la valoran.