Me pareció muy extraño no haber leído críticas o ataques hacia esta película de parte de la iglesia o de los sectores más conservadores. Lo digo porque insinúa una relación sexo afectiva entre dos hombres, y un poquito más que solo insinuar, en zona de spoiler les cuento más. La verdad que es refrescante ver una película animada que no sea de Pixar y que esté buena.
Al parecer uno de los grandes estudios de animación desistió de traer esta historia a la pantalla grande, y ahí es cuando apareció don Netflix, ni lerdo ni perezoso, para traernos a la pantalla chica este entretenido film basado en el cómic de ND Stevenson. La N grande suele tener buenas películas animadas, sin ir más lejos recuerdo “The Sea Beast” que estuvo nominada a los premios de la academia. Quizás Nimona también se gane una nominación.
Una
historia que comienza hace más de 1000 años, y sucede en un futuro (o un mundo
más futurista), pero los caballeros siguen siendo quienes defienden este reino
de los “monstruos”. Es un film que no deja nada afuera, desde las críticas
socio políticas, pasando por el juzgar a la gente por lo que aparenta, hasta
llegar a temas de libertad sexual.
Nimona,
nuestra protagonista, es un “monstruo”. Esto quiere decir que es diferente a
los demás porque puede cambiar de forma “Shapeshifter”, y por eso es castigada
y juzgada. Ya sabemos que el ser humano le tiene miedo a todo lo que es
diferente, y si aparece una niña que se puede transformar en rinoceronte, será
juzgada. Lo que se olvidan es que es un ser con sentimientos, que sufre y la
pasa mal cuando recibe todo este tipo de ataques.
Nuestro
otro protagonista es Ballister. En este mundo ficticio solo los que son
descendientes de quién fue la primera defensora de este pueblo de los
“monstruos” pueden ser caballeros. Ballister no es descendiente ni nada, pero
de chico demuestra que quiere ser un caballero, y la reina le da una
oportunidad para serlo. Acá vemos la diferencia de clases. Si bien en ningún
momento se habla de un contexto socio económico, que los caballeros sean todos
blanquitos y que Ballister sea más moreno, dice mucho. El mismo nivel de
racismo que existe en nuestro mundo, está en este. Lo interesante de la
película es que lo hace consciente y real.
Entonces
tenemos dos personas dejadas al margen de esta sociedad, buscadas por un crimen
que no sabemos si fueron ellos o no. Los mensajes que transmite este film son
concretos y claros, no pretende ir más allá. Además de tener esta profundidad,
tiene buen humor y momentos muy entretenidos. Algunas situaciones que te
dejaran cuestionándote tus privilegios y otras en las que quizás, termines de
entender que no hay que prejuzgar a la gente por su apariencia o por su
“clase”.
La
animación está bastante bien, es entretenida y llevadera. Me gustaron muchos
las voces en su idioma orignial, como así también la banda sonora que acompaña
en todo momento. Tiene un buen guion que no desentona en ningún momento,
mantiene el ritmo y algo de tensión.
Mi recomendación: Buena película animada para ver en familia, salvo que seas de una familia conservadora.
Mi
puntuación: 7/10
Zona
de spoiler:
No quise poner en la crítica la parte del beso entre la pareja de hombres, pero más que nada porque sucede cerca del final de la película y no es claro, durante el film, que puedan llegar a estar juntos. Me pareció copado que haya sucedido, que no hayan tenido miedo de ponerlo en pantalla, miedo de que le pase lo mismo que a Pixar con “Lightyear”. Probablemente este film no estará disponible en países más conservadores.
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