No sé qué fue lo que me llegó tanto, pero les confirmo que lloré muchísimo con esta película. Desde la escena del tiroteo, hasta su final. Es que está tan bien contada. No sólo bien, sino que muy cuidadosa. No cae en lugares típicos de este film. No te muestra los cuerpos caídos, no te muestra los tiroteos. Se centra en Vada y en Mia. Dos chicas de este secundario que jamás hubiesen sido amigas sino fuera porque estaban en el momento justo, en el lugar justo y acompañarse en esa horrible situación.
Hay
una delicadeza y sutileza a la hora de contarnos esta historia. Todo un logro
por parte de Megan Park, siendo este film su ópera prima. Un gran debut como
directora y guionista. Sobre todo, porque nos hace entrar en la mente de Vada,
vemos todo lo que le pasa, cómo van avanzando los días post ataque, cómo se
aleja de sus amigos pre atentado, cómo se aleja de a poco de su familia, de su
hermanita pequeña quien más parece extrañarla, voy a hablar en la zona de
spoiler de la escena de estas dos en la pieza de Vada…Uff, piel de gallina.
Los
tiroteos en secundarios en Estados Unidos son moneda corriente. Ojalá no lo
fueran, este film es uno más de los que busca que esto cambie. Como dije antes
lo más interesante del film es el enfoque y la sutileza que tiene. Explora muy
bien los estados mentales que puede llegar a tener una víctima de un ataque de
esta índole. Cómo dice Vada: “Estoy enojada porque no tenía idea que un tipo
con un arma podría arruinar tanto mi vida en seis minutos”, tremenda esa frase
y profunda.
Las
actuaciones están todas bien, un buen elenco. Empezando por la talentosísima
Jenna Ortega, quién logra transmitir todas estas emociones a la perfección
(sobre todo en el final), una actriz joven con muchísimo futuro. Maddie Ziegler
también hace un buen papel, sutil y opuesto a Jenna. Niles Fitch, para muchos
de nosotros siempre serán Randall, pero este papel también le queda bien.
También son destacables las pequeñas intervenciones de Julie Bowen y Shailene
Woodley, dos grandes actrices que aportan muchísimo.
Es
un film necesario, hermoso por donde se lo mire. Incluso cuando tiene cambios
de ritmo, cuándo parece que va a caer en una meseta, logra salir de este lugar
con alguna acción que va más allá del tiroteo. No nos olvidemos que Vada es una
adolescente, y esa etapa de nuestra vida es bastante caótica por varios
motivos, súmale el tiroteo y es un desastre.
Mi
recomendación: Interesante y profunda
película que te va a llegar a lo más profundo.
Mi
puntuación: 8/10
Zona
de spoiler:
La
escena final cuenta con más de la sutileza que la directora nos mostró a lo
largo del film. Vada parece estar cerca de salir de ese lugar triste y oscuro
en el que estaba. Hasta que una noticia de otro tiroteo la hace entrar en un
ataque de pánico y/o ansiedad…excelente final.
La
escena en que la hermana menor le “reclama” que no le da bola, y le pregunta si
está enojada es…tremenda. Cuando Vada le cuenta todo lo que le pasa y que lo
único que atino a hacer cuando pensaba que se estaba por morir fue mandarle un
“Te quiero” a ella…es para llorar a moco tendido, y créanme que lo hice.
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