La serie nos muestran con un poco más de profundidad cómo llevar el duelo, la muerte de amigos de toda la vida, de tu pareja de toda la vida y cómo avanzar, cómo seguir con el apoyo de tus seres queridos, cómo afrontar que uno está creciendo, uno ya es grande y hay cosas que ya no puede hacer, y hay otras que debe hacer como por ejemplo ir al médico seguido, dejar de lado ese orgullo del hombre, del macho, dejarlo de lado y no repetir constantemente ‘yo no voy al médico’. Entender y aceptar que sí hay que ir al médico no solamente cuando uno es grande sino en todo momento de su vida.
Esta
serie logra capturar esos momentos mezclándolo con momentos muy divertidos en
varios sentidos, la dupla de los dos actores principales está bastante bien son
muy llevaderos. También es interesante también el ver que el personaje
principal es un profesor de teatro, un acting coach, que él nunca quiso ser
eso, él es actor, es como eso que dicen que los árbitros de fútbol son
jugadores frustrados o que los críticos de cine somos actores frustrados, bueno
sería algo parecido en este caso, pero logra capturar bastante bien todas estas
situaciones de la vida adulta, de los adultos mayor. Además de todas las
muertes y las enfermedades, hay hijas que están constantemente cayendo en
rehabilitación, cómo sobre llevar la vida amorosa post muerte de tu pareja o después
de haberte divorciado varias veces a lo Ross Geller.
Hubo
un momento que tenía miedo en realidad miedo no, pero me daba cosita verla por
el humor que podía llegar a tener, ya que el creador es Chuck Lorre es el mismo
creador que Two and a Half Men y The Big Bang Theory, y su humor no me termina
de agradar o al menos no el de Two and a Half, pero la verdad que el humor que
utiliza en esta serie es muy sutil, está muy bien realizado, no busca el chiste
fácil como en las serie mencionadas, es un humor menos cliché y más re buscado
por momentos, en el buen sentido.
Sumado
que tiene tan buenos actores como Michael Douglas y Alan Arkin la serie está bastante
bien. Además de estos dos protagonistas tiene un gran elenco, repleto de
comediantes que aportan lo suyo, su granito de arena, ya sea haciendo de ellos
mismos o siendo parte de toda la serie como el papel de Sarah Baker, la hija
del personaje de Douglas, está bastante bien, aporta mucho a la serie. Hay un
gran elenco secundario que ayuda a sostener la serie, sobre todo en la tercera
temporada tras la partida (no, no se murió) de Alan Arkin.
Por
momentos me hacía acordar a la serie de Larry David ‘Curb your enthusiasm’,
tiene un humor similar, con estas situaciones de la vida diaria que le puede
suceder a cualquiera de nosotros cuando sea grande. Es una serie bastante
interesante, dan ganas de seguir viéndola constantemente no hay un momento que
decís, oh me harto esta serie de tantas muertes o de gente grande, no, está muy
bien realizada y dan ganas de seguir viéndola, tanto por su humor, cómo por los
momentos dramáticos. Me hecho llorar un par de veces, pensando en la forma que
tenemos de sobrellevar los duelos. No es una serie para alguien que perdió un
ser querido hace poco o que no tiene un sentido del humor un tanto oscuro.
Mi recomendación: Comedia
de un humor oscuro por momentos, que te hace reír lo suficiente para olvidarte
de los mambos.
Mi puntuación: 8/10
Donde Verla: Netflix
Tiempo invertido: 3
temporadas, 22 episodios. 22-33 minutos
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