Liv Moore (el juego de palabras en el nombre es de otro nivel) es una estudiante de medicina que no le gusta salir pero al estar triste por romper con su novio de años decide salir un día. Mala suerte para ella justo en esa fiesta mucha gente consume una droga que hace que se transformen en zombies. Pero ojo, que si comen cerebros pueden mantener su aspecto humano y ser conscientes.
Al comer los cerebros estos zombies/humanos, mientras el cerebro esté aún en su sistema, adquieren la personalidad y destellos de recuerdos de la persona dueña del cerebro. Nuestra protagonista comienza a trabajar en la morgue para no tener que matar gente y consumir sus cerebros, de esta forma también ayuda a la policía a resolver los asesinatos de esas personas muertas.
Como les dije, no es una serie de zombies más. Es una serie policíaca con zombies, comedia, drama, amor. Es una belleza de serie. Nos muestra como el capitalismo es parte vital de nuestras vidas, habiendo personajes que son zombies, y se aprovechan de que pueden convertir a otras personas que por lo general son poderosas o adineradas y no les conviene que el mundo sepa que son zombies.
Es una clara crítica al capitalismo, pero a la vez se burlan de éste. Otro factor interesante de la serie son las relaciones entre los personajes, como Liv busca no contar su lado zombie a casi nadie, pero los zombies cuando pasan mucho tiempo sin comer cerebros se vuelven esos típicos que conocemos y que son súper violentos y solo buscan comer. Es divertida la forma en que Liv come los cerebros. Nos muestran como los cocina, los condimenta, básicamente le mete onda y todo en unos segundos.
La actuación de Rose McIver como nuestra protagonista es excelente. A lo largo de las 5 temporadas tiene que actuar como las personas de las cuales se come el cerebro. Muchísimas personalidades encarna Rose y lo hace muy bien. Destacable también es el gran Rahul Kohili como el amigo, jefe y confidente de Liv. El resto del elenco está bastante bien, al nivel de la serie.
Discriminación, amor, amistad, lealtad son otros temas que la serie toca muy bien y con esta variedad de tópicos y géneros que tiene, siempre dan ganas de seguir viendola, siempre más y más. Mantiene la calidad a lo largo de la serie, pocas logran hacerlo y si bien por momentos parece repetitiva, hay algo que la hace distinta.
Dato de color que a nadie le importa: La van/combi que tuve en Nueva Zelanda se llamaba Liv en honor a la protagonista de la serie.
Mi recomendación: Una serie de zombies distinta, que vale la pena ver y disfrutar.
Mi puntuación: 9/10
Donde Verla: HBO Max
Tiempo invertido: 5 temporadas, 71episodios. 42 minutos.
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