Escribir una crítica de esta serie en el 2022 casi no tendría sentido, pues es una de esas series que mucha gente vio y hasta vieron la película y el spin off (Better Call Saul). Pero no deja de ser importante hablar de esta serie que marcó mucho en el mundo televisivo.
Llegué a este serie gracias a un compañero de trabajo, en aquel entonces trabajaba en un call y también me dedicaba a “facilitar” series y películas. Martín me la pidió y me recomendó que la mirara. La primer temporada eran 6 capítulos y dije porque no. Al principio no me atrapó mucho, es un poco lenta y sentía que no pasaba nada…pero cuando comenzó la temporada 2, no pude parar de mirarla.
Fui de esos que tuvo que esperar casi un año entre la
primera parte de la temporada 5 y la segunda. Si mal no recuerdo el atraso fue
porque a uno de los actores le robaron el guion y Vince Gilligan se vio
obligado a tener que hacer algunas modificaciones. Aún recuerdo el suspiro y la
cara de sorpresa que puse en ese final de la primera parte, esas cosas no se
las deseo ni a mi peor enemigo.
La serie está escrita de una forma maravillosa. Me hace
acordar un poco a This Is Us en el sentido que el creador no extendió la serie
debido a la fama (como sucede en varios casos), si hicieron spin off y otras
cosillas, pero lo que es Breaking Bad en sí, mantuvo su esencia y duro lo que
tenía que durar, como todo en la vida, ¿No?
La forma en que está contada la historia de Walter White es
magnífica, todos los altibajos por los que pasa, su familia, su trabajo, el
querer dejar algo, ya sea algo económico o una marca en el resto. Quizás se le
termina yendo un poco de la mano a nuestro querido protagonista, quien a lo
largo de la serie es víctima de los denominados “pecados capitales”, y eso está
llevado a acabo muy bien por parte de creador y guionistas.
Las actuaciones de la serie son de altísimo nivel. Mucha
gente no lo creía capaz a Bryan Cranston de hacer un papel que no sea cómico,
como el que hizo en “Malcolm in the Middle” pero les tapó la boca a todos esos
demostrando su gran rango actoral, es uno de esos actores que uno tiene como
inspiración. El resto del elenco no se queda atrás. Aaron Paul, su Jessie y su
latiguillo “Bitch” son gran parte de esta serie. No voy a nombrar a todos los
demás, pero hay muchísimos actores y actrices de alto nivel que ayudan a que la
serie hoy sea una serie de culto, esas que hay que ver aunque sea una vez en la
vida.
Siempre admiré la banda sonora, lo bien elegidos que están
los temas, los sonidos, es una parte intrínseca de la serie que también hace a
su status. Ni hablar de la imagen y la fotografía, muchos pasajes
espectaculares del sur de los Estados Unidos. Tiene muchas tomas interesantes
que le dan más altura a la serie.
Mi recomendación: Si no la viste, mirala. La vas a disfrutar en
su totalidad.
Mi puntuación: 10/10
Donde Verla: Netflix
Tiempo invertido: 5
temporadas. 62 episodios. 43-58 minutos.
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