La historia real es un caso terrible, desgarrador por donde se lo vea. Si bien no son los padres biológicos, es horrible pensar que las personas que se suponen que tienen que cuidar de la pequeña son quiénes terminan siendo los que parecen ser culpables (no quiero caer en spoilers). Uno de los errores de esta serie es abusar de la parte ficcionalizada. Es cierto que no sé si todo lo que dicen es cierto o no, pero cuando te cuentan historias de personajes secundarios, que no son relevantes PARA NADA, es cuando uno empieza a cuestionar.
No termino de comprender por
qué tiene un puntaje alto esta serie, no está bien contada, se va mucho por las
ramas, por momentos es confusa. Los capítulos duran todos 50 minutos y le
sobran varios de esos minutos. A mí no me atrapó en ningún momento, es de esas
series que uno puede poner de fondo mientras hace otra cosa y levantar la
mirada al televisor cuando algo parece ser importante, nada más.
Las actuaciones están a la
altura de la serie, ninguno parece destacarse, todos parecen estar en un
registro muy bajo, como sin ganas de hacer lo que están haciendo. Quizás Javier
Gutiérrez es quién está un poco mejor que el resto. Candela Peña se la pasa
llorando y a veces sin sentido. Me parece que le faltó explotar al elenco que
tiene. María León es buena, pero acá no hace mucho y quería más de ella.
No podría decir bien que es
lo que esperaba de esta serie, siento que le sobró tiempo y algunas historias
secundarias, le faltó más profundidad en lo que pasó. Nos podrían haber contado
algo de Asunta, conocer más a la pequeña. Muestran muchas evidencias que en el
juicio ni se hablan, quizás en la vida real pasó eso. Le falto bastante para
ser una buena serie de true crime.
Mi recomendación: Pasable serie española, un crimen duro y
horrible.
Mi puntuación: 5/10
Donde Verla: Netflix
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