Casi que no la veo luego de leer un par de críticas que atacaban a la serie justamente por ser tan religiosa. Por suerte lo religioso aparece en los últimos episodios de esta serie, no hay tanta propaganda como pensé que iba a haber, pero la hay y cuando aparece es inevitable que te dé un poco de bronca como la religión pretende solucionar todo con algunas palabras de fe cuando encubren pedófilos y fueron cómplices de la dictadura militar en Argentina.
Pero no todo es malo en esta
serie nacional. Sutilmente toca temas importantes como ser el racismo, el
aborto, la violencia a la mujer, la corrupción, la familia, el amor, la muerte.
Cada uno de sus 8 capítulos tiene el foco puesto en distintos personajes que
son vitales para la historia general. Si hay algo positivo que tiene es que lo
que nos quiere decir, lo dice bien. Quizás se va un poco por las ramas, pero
nos cuenta un poco de cada uno de los personajes y cómo suma a la historia
general. El primer capítulo se enfoca en nuestro protagonista, a quién vamos
conociendo más y más con el transcurso de los capítulos. También vemos las
motivaciones de otros personajes, cómo algunas decisiones influyen en los otros,
tiene varios momentos que la hacen interesante de ver.
Además de todo eso tiene un
elenco que está bastante bien en todo momento. Nuestro protagonista es
encarnado por Guillermo Pfening quién hace una gran labor, es creíble en todo
momento y tiene un buen crecimiento su personaje. Laura Azcurra está bastante
bien, hace un buen rol. Victor Laplace hace un rol bastante oscuro, es de esos
que dicen que los ladrones son todos iguales, que hay que matarlos a todos, le
sale muy bien ese personaje. Lucas Ferraro y Gastón Soffritti están bastante
bien en sus roles. Agustina Cordova es la otra mujer que hace una buena
actuación. No quiero olvidarme de mencionar al gran Alejandro Awada, quién hace
un papel aceptable.
Por momentos parecía que la
serie nos quería mostrar los 7 pecados capitales de una forma distinta, quizás
esa idea se me instaló en mi mente sabiendo que la religión era importante en
esta serie, pero luego me di cuenta de que no era tan así. Tenemos la aparición
constante de este personaje que no sabemos bien si es Dios o un ángel, pero que
‘está en todos lados’ y quién es la voz de la consciencia de nuestro
protagonista, intenta guiarlo por el camino del ‘bien’ (no, no voy a hablar de
nuevo sobre ‘el bien y el mal’). Su desarrollo me parece correcto, lo que no me
termina de agradar es toda esa propaganda religiosa, pero entiendo que es la
idea de la serie y por eso no le pongo una nota baja.
Mi recomendación: Interesante serie nacional, buen desarrollo y
buenos mensajes.
Mi puntuación: 6/10
Donde Verla: Bafilma
Tiempo invertido: 1
temporada, 8 episodios. 40-45 minutos.
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