miércoles, 5 de junio de 2024

Generación 56k

La verdad no sé qué tiene Italia con sus series del género comedia romántica, pero ya es la segunda que veo y me llena el corazón de alegría y me hace creer un poco en el amor, un poco no más, tampoco tanto. Esta serie cortita, de capítulos cortitos, es bella, tiene momentos muy divertidos y otros muy tiernos. Nos cuenta la historia entre el pasado y el presente, cómo era relacionarse hace 20 años atrás casi y cómo es relacionarse hoy con las apps de citas. Hermosa y divertida.

La otra serie que me encantó que tiene un aire similar fue “Guía astrológica para corazones rotos” la cuál sucede en Torino. Esta serie que terminé de ver sucede en Nápoles y en una isla cerquita llamada Procida, saben que no suelo hablar de entrada sobre la fotografía y la imagen, pero en esta serie es necesario. Que hermosa que es la imagen, la islita de Procida se ve hermosa, dan ganas de ir a vivir a una isla así, rodeada de agua, esas casitas coloridas bellísimas, sus calles de adoquines y angostas, bellísima la imagen y fotografía.

Es una de esas series que se siente un mimo al corazón, me es difícil ponerlo en palabras (pues Quirón en géminis), creo que lo más cercano a lo que me hizo sentir es eso, un mimo al corazón, risas y llantos con respecto a los vínculos. Quizás me toca de cerca porque soy de esa generación, viví lo que era comunicarse con el modem de 56k y su ruido insoportable para conectarse a internet, no usarlo mucho para que no gaste tanto y porque ocupa la línea telefónica, esperar mucho para descargar una imagen, y si soy de esa generación, también soy de la que hoy usa apps de citas, me pasó que me dejen plantado, usé la técnica de la amiga “en problemas” para irme de una cita (no recuerdo que la hayan usado conmigo). Por todo esto es que la siento un mimo al corazón, me hizo creer un poco en el amor, aunque también me hizo descreer en el amor. Soy complicado…creo.

La historia está muy bien contada y desarrollada a pesar de durar poco, hasta me quedé con ganas de ver más, de saber más sobre estos personajes. Igual me dio la sensación que fue pensada para una sola temporada, porque si bien puede haber hilo para tejer más historias, hay algo que me dice que no van a haber más. Tiene un buen desarrollo de personajes, lo suficiente para contarnos lo que necesitamos saber. Algo interesante que tiene es que va cambiando de perspectiva o al menos así lo sentí. Es decir, la historia empieza siendo contada por un personaje y va variando por capítulo e incluso dentro del capítulo. No siempre es contada desde el ángulo de un solo personaje, eso me pareció genial.

Actoralmente también está muy bien, creo que el casting de los protagonistas fue excelente, no solo de adultos sino de niños. Me enamoré de Cristina Cappelli y su sonrisa. Una actriz con mucho futuro fuera de Italia o al menos para mí. Sus expresiones y su forma de actuar son genial. Angelo Spagnoletti otro que tiene gran futuro, muy bien actuando y con una belleza bien italiana. Gianluca Fru y Fabio Balsamo completan el trío de amigos y lo hacen bastante bien. Mención especial para la pequeña Azzurra Iacone y el pequeño Alfredo Cerrone hacen muy bien sus roles. El resto del elenco también está bastante bien.

La serie para mí es bellísima. Me hizo reír, me hizo llorar, me hizo dar ganas de estar en pareja. Me llegó la historia de estos personajes, le creí todo a todos. Tal vez a la juventud de hoy no les parezca tan buena o no entiendan lo que fue vincularse de esa manera, esta serie lo representa muy bien. Porque no sólo habla de vincularse sexo afectivamente, sino también la amistad, la familia, los padres, los hermanos…no deja ningún vínculo libre.

Mi recomendación: Notable serie italiana, para los que son viejitos y tiernos de corazón como yo.  

Mi puntuación: 8/10

Donde Verla: Netflix

Tiempo invertido: 1 temporada, 8 episodios. 23-26 minutos.

Zona de spoiler:

Ese final…me pareció perfecto. Todo iba encaminado a que Mati se quedaba con Daniel, pero no o en realidad no lo sabemos. Ella decide seguir su corazón, y su corazón le dice que se vaya a hacer la maestría a París, Daniel le dice que la puede ir a visitar a pesar de que no es lo que él esperaba…me pareció el final perfecto. Reconociendo que el amor romántico o los vínculos sexo afectivos no lo son todo, cada uno de nosotros tiene sueños, y siempre hay que ponerse primero a uno. 

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