Al principio de los 2000 se pusieron de moda unos videos de huevos parlantes. Recuerdo bastante ver esos videos, no existía YouTube y era complicado verlos, pero me las rebuscaba. Eran bastante divertidos (recordemos la época), y desde 2008 que tengo en mi lista la película que se desprende de esos cortos. Un film entretenido, con muchos chistes para adultos y una animación más que aceptable.
Esta es una de esas películas que hay que verla con ganas de reírse de cosas bobas, no esperes una historia brillante, no esperes chistes sofisticados, sólo sentarse a verla para reírse un rato de situaciones cliché, pero con huevos parlanchines. La animación está bastante bien para ser de 2006, simple y con buenos detalles, no se destaca, pero cumple.
La
historia tampoco es algo de otro mundo, un huevo que quiere ser pollo y no
quiere ser comida. Tan simple como eso. Seguimos las aventuras de Toto para
poder volver a la granja con su madre y convertirse en pollo. No hay muchas
vueltas para darle, no hay subtexto, no hay mensajes subliminales, una película
que recorre el camino de A hacia B sin sobresaltos.
Bueno,
con algunos sobresaltos en la historia de Toto, situaciones divertidas con
otros huevos, situaciones divertidas con un pedazo de tocino, con un gato, con
ratas y hasta con los humanos. Como dije más arriba tiene muchos chistes
apuntados a un público adulto, la mayoría de índole sexual, esos de doble
sentido que te dan una risita por lo bajo. También tiene esos chistes tontos
que te sacan una sonrisa. No es una película que va a quedar en la historia del
cine animado, pero cumple con divertir y entretener.
Mi
recomendación: Una interesante película
animada, para los que vimos aquellos videos de Brandy huevototote.
Mi
puntuación: 6/10
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