Thriller,
acción y comedia negra son los géneros que entrelaza de una interesante manera
el director catalán Alex de la Iglesia. Una escena de apertura mostrándonos a
los personajes que serán parte de “El Bar”, estos cruzándose en la calle sin
dar cuenta uno de otro, hasta que se encuentran en ese lugar clave.
La
mañana transcurre bien hasta que alguien entra tosiendo al bar, todos lo miran
con cara de asco y este se va al baño. El empresario decide irse cansado de
esperar su orden y cuando sale, empieza el caos. A partir de este momento el
ritmo de la película se mantiene, logrando una meseta que por momentos tiene
picos de tensión.
Ocho
personajes encerrados en un bar donde a causa de este encierro nos muestran lo
peor del ser humano, o en palabras de Nacho “Lo que somos realmente”. Ante el
miedo todos reaccionamos de manera distinta, pero lo que tenemos en común es el
querer sobrevivir a lo que sea que estemos viviendo. La miseria humana en su
máximo esplendor, la traición, la mentira, pero siempre hay una pura y sana. La
ley del más fuerte se hace presente, en este caso el más fuerte es el que tiene
el arma. Arma que cumple la función de cetro por momentos, cambiando de mano y
por lo tanto, cambiando de mano el poder.
La
acción transcurre en tres lugares, pero la buena utilización de los planos hace
que parezcan muchos más. Las actuaciones muy pertinentes y atinadas al tipo de
película, una de las cosas malas es Awada, que hace una tonada gallega bastante
mala. Como dije antes el ritmo se mantiene pero a veces hasta parece un tanto
reiterativo y hasta predecible en muchos puntos.
Mi
recomendación: Película interesante del director catalán,
si obvias el cine no pasa nada, mirala en tu casa tranqui.
Mi puntuación: 7.5/10
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